En honor a la publicación de esta semana del "Folleto" de cannabis, analizamos la producción de cáñamo en la región.
Han pasado tres años desde que el proyecto de Ley Agrícola de 2018 legalizó la producción de cáñamo en todas las tierras agrícolas en los Estados Unidos después de casi 50 años de prohibición. Se les dio el siga y los agricultores esperaban sacar provecho de la nueva y polifacética cosecha. Más de 11,000 acres de cáñamo se cultivaron en Oregon en 2018 y para el 2019 subió a más de 63,000 acres.
Desde el alza en 2019, la industria se vio en un mercado sobresaturado. En 2020, Oregon creció menos de la mitad de lo que creció el año anterior y en lo que va del año 2021, el estado produjo la menor cantidad de cáñamo desde su legalización, cerca de 7,500 acres en lo que va del año. Esto ha traído problemas para el Centro de Oregon, donde el clima es muy apropiado para cultivos resistentes a la sequía y las heladas.
"Dicen que para el mercado de CBD se necesitan cerca de 20,000 acres para cultivar suficiente cáñamo y así cubrir las demandas de la nación," dijo Matt Cyrus, presidente del Departamento Agrícola del Condado Deschutes y de la Asociación de Cáñamo del Centro de Oregon. "En 2019 se levantaron cerca de 500,000 acres a nivel nacional. Así que, obtuvimos un suministro de 25 años en un año."
El excesivo suministro afectó bastante los precios. En 2017, el cáñamo fue cultivado por unos cuantos que optaron por entrar a programas piloto en todo el estado y los precios por una libra de biomasa, lo que queda de la planta después de ser cultivadas las flores, podría venderse por hasta $100. Ahora se vende entre $1-2 por libra. También existe competencia entre los mercados internacionales; Estados Unidos cultiva la tercer mayor cantidad de cáñamo en el mundo después de China y Canadá. Una encuesta que llevo a cabo Hemp Benchmarks mostro que más de la mitad de los productores de cáñamo estaban reduciendo o manteniendo el mismo volumen de producción de cáñamo en 2021 y que más del 20% no planto cáñamo en 2020.
"Es una siembra muy cara para cultivar, estamos hablando de una inversión de miles de dólares por acre y cuando no hay una recuperación, hay muchos productores que de verdad apuestan la finca," comento Cyrus.
Históricamente, el mercado más fructuoso para el cáñamo ha sido el de los aceites medicinales de CBD (cannabidiol) usados en destilados, cremas y formas fumables. Con los precios a la baja, los productores están explorando usos más tradicionales del cáñamo, como la fibra y el aceite de semilla de cáñamo, un suplemento dietético sin CBD o THC (tetrahidrocannabinol).
Aunque el mercado está la caída, Cyrus espera que el mercado se estabilice una vez que exista una infraestructura que los respalde.
"Es un péndulo que, como cualquier mercado, ya sea un auge o una caída en bienes raíces o hasta en cada producto básico, maíz, aceite de trigo, o lo que sea, los péndulos están a la baja y espero que el péndulo vuelva a subir," dijo Cyrus.
